España se destaca como una de las mejores economías de Europa, respaldada por un sistema financiero sólido, un mercado lleno de oportunidades y un enfoque proemprendimiento. Además, su situación geográfica privilegiada le brinda acceso a mercados potenciales en Europa, Latinoamérica y África, respaldada por una red de infraestructuras de primer nivel y sólidas redes de energía y telecomunicaciones.